El loko 40 kumpleaños de Kim Kardashian

Cumplir 40 años es la leche. Es una edad en la que o te sientes fabulosa o te sientes una anciana. Te tomas unas copichuelas con las amigas y te vienes arriba y piensas que has celebrado tu 40 cumpleaños por todo lo alto. Pero luego ves el 40 cumpleaños de Kim Kardashian y se te quitan las ganas de vivir. Y piensas que mas te habría valido quedarte en casa y soplar tu vela sobre una magdalena. Una isla, 30 amigos y familiares y muchas pcr para descartar covid. Estas y otras extravagancias ocurrieron en el 40 cumpleaños de Kim Kardashian

Tititín: te ha llegado una notificación. Es el 40 cumpleaños de Kim Kardashian y te invita. Te manda la invitación dos semanas antes porque ojo: no vais a tomar unas birras en el bar del barrio y a lo mejor unas tapas si la economía lo permite.

Te pide primero que te hagas una pcr para descartar que tengas covid, (muy prudente por su parte) y luego alquila una isla entera para ti y 29 amigos y familiares más dónde podréis hacer de todo: beber, bailar hasta el amanecer, bañaros en aguas transparentes, avistar ballenas, montar a caballo, tomar el sol, daikiris, mojitos… joder pegaros la vida padre.

Te cita un día, te llevas tus 27 maletas, saludas y directa al jet privado que ha fletado para llevarte al paraíso. Y ya puedes llevar modelitos porque el cumpleaños es gitano y durará unos días y unas noches. Allí no hay toque de queda. Estás en el ***ing paraíso, hombre.

Y empieza la fiesta. Kim ha invitado a todos. Kourtney, Kendall, Khloe, Robert. Pero Kylie Jenner no ha podido asistir, porque debe estar súper ocupada colocando la mega mochila del cole de su hija Stormi o a lo mejor porque se está contando las manchas de su disfraz de leoparda. El caso es que no ha venido a la fiesta.

Tampoco hemos visto a Kanye West, su maridito , y es que al parecer está muy ocupado con las elecciones presidenciales de EEUU. Pero no sabemos porqué. Porque además si es Yesus debería estar en todas partes, ¿no?

Pero lo mejor, lo mejor de la fiesta han sido sin duda las declaraciones de Kim Kardashian, que no es solo una celebridad, sino que se está convirtiendo en una auténtica filósofa de la vida. Nos ilumina más que algunos de sus relucientes looks.

Apunta. Lección de vida number one: ¡40 y sintiéndome tan humilde y bendecida! No hay un solo día que dé por sentado, especialmente, durante estos momentos en los que todos recordamos las cosas que realmente importan”. Toma ya.

Lo de humilde suponemos que lo dice por la Isla privada que alquiló y todas las actividades que pudieron realizar, como navegar en kayak, avistar ballenas, montar en bicicleta y hasta ver una película en la playa. Lo normal. Yo he ido a cientos de cumpleaños así.

La celebrity tiene un recuerdo para todas aquellas personas que no tienen tanta suerte como ella en la vida

Con estas emotivas palabras: “Me doy cuenta de que, para la mayoría de las personas, esto es algo que está muy lejos de su alcance en este momento, por lo que, en momentos como estos, recuerdo humildemente lo privilegiada que es mi vida”. En momentos como estos. Dice.

Cuando se levanta todas las mañanas en su mansión, y recorre los cientos de metros de su vestidor para ponerse cualquier cosilla por encima de los 2000 euros. O cuando estaba alquilando el jet para 30 personas, ahí no se acordaba tanto.

En fin, una cosa si os digo, la resaca es la misma, y a partir de los 40 las recuperaciones de las fiestas son lentas y dolorosas así que nos consolamos con saber que seguro que luego tuvieron un dolorcillo de cabeza al menos.

Envidia máxima.

Ttititín. Otro whatsapp. Mi amiga Sara para saber si bajo a su cumple que invita a unas birras.

Pues eso.¡Felicidades Kim!