Can Yaman ha roto con Turquía sin remedio. El actor que le debe todo a su país de origen se desmarca de los suyos con un gesto que no ha gustado precisamente a su fandom nacional.
Turquía está dividida con respecto a los últimos movimientos del protagonista de Pájaro soñador. Por una parte, es grande el orgullo que muchos sienten por que su gran intérprete haya conseguido hacer carrera más allá de las fronteras de su país, pero otros muchos creen que Can Yaman ha roto con Turquía y no se lo perdonan. Su evento en Roma y todo lo que implica ha sido la gota que ha colmado el vaso.
Can Yaman ha roto con sus raíces (o así lo sienten los turcos)
Es rara la vez que Can postea en turco; de hecho, lo habitual es que lo haga en italiano. Esto es solo un signo de lo que en Turquía ya se ha convertido en un movimiento bastante bestia contra él. No lo quieren de vuelta a su país y hay muchísimo rencor hacia el actor.

Su acto en Roma dentro de la gira Break the Wall ha vuelto a levantar ampollas en el mismo sentido que indica el tuit: ¿por qué Can está ayudando a los niños italianos y no a los turcos? Su cuenta dedicada a este fin y la oficial posteaban, al hilo del encuentro en Roma: “La invitación está dirigida principalmente a jóvenes, protagonistas del tour Break the Wall: ellos son nuestro futuro. Juntos por un mundo diferente y escuchando, donde la posibilidad de una vida mejor también depende de nuestros esfuerzos”. Y aquí está parte de todo el odio vertido hacia el intérprete.
El propio ministro del Interior italiano estuvo con él
El ministro del Interior recordó la importancia de donar para ayudar a los jóvenes con problemas, objeto de la fundación del actor. Pero ¿qué ocurre con los chavales turcos quienes, además, están sufriendo las consecuencias de un devastador terremoto? ¿No hay tiempo para ellos?

Los defensores de Can Yaman lo justifican diciendo que se volcó con esta catástrofe, pero sus detractores avisan: todos los adolescentes de todos los países sufren problemas de salud mental agravados por la pandemia. Para colmo, los de Turquía han pasado por una situación traumática. Can Yaman parece que está cavando su propia tumba… ¿Qué hará para recuperar su prestigio en el lugar que le dio la vida?