Champiñones caramelizados: la guarnición que estabas esperando

Tenemos la receta definitiva para esas carnes que cocinas a la plancha y a las que parece que les falta algo. Estos champiñones caramelizados serán el mejor acompañamiento para todos tus platos

Situación: te haces para comer un filete a la plancha con la mejor de las intenciones (bienvenida, buena conciencia), pero llegas a la mesa y piensas que no puede haber plato en el mundo más triste. Te ha pasado alguna vez, ¿verdad? Bien, pues te traemos una receta de champiñones caramelizados que va a ser la una solución, porque son la guarnición perfecta casi para cualquier carne. Igual que el curry de verduras, puede alegrar cualquier plato que lleves a la mesa.

Estos champiñones caramelizados tienen un sabor brutal y son el acompañamiento perfecto para esas carnes que pueden quedar algo tristonas al cocinarlas. Ponlos de guarnición con unos medallones de solomillo, por ejemplo, o con uno taquitos de pollo salteados y tendrás un plato súper completo y riquísimo. Además, lo bueno de esta receta es que puedes ponerla en un bol en la mesa, y que cada uno se sirva lo que quiera, sin necesidad de que se mezclen sabores.

Si aún no te hemos convencido, ten en cuenta que los champiñones son uno de los alimentos más bajos en calorías y más recomendados. Tiene un montón de vitaminas y minerales, además de proteína vegetal y fibra. Y son diuréticos y antioxidantes. ¿Necesitas más?

Dos puntualizaciones. Uno, la receta es para dos personas. Si quieres prepararla para más, no tienes más que ir doblando las cantidades en proporción. Dos, te dejamos un vídeo súper chulo aquí abajo que te explica todos los pasos de forma muy clara.

VÍDEO

Champiñones caramelizados

• Cantidad: 2 personas
• Calorías: 127 / 100 gramos
• Tiempo de preparación: 20 minutos
• Dificultad: fácil

Ingredientes

• 200 gramos de champiñones
• medio vaso de vino blanco
• medio vaso de salsa de soja
• tres cucharadas de azúcar moreno
• una nuez de mantequilla
• aceite de oliva

Modo de elaboración

1. Limpiamos bien los champiñones y picamos el tronco.
2. Los rehogamos en un chorrito de aceite de oliva. Añadimos el azúcar moreno, el vino y la salsa de soja.
3. Dejamos cocer a fuego medio unos 8 minutos, mientras se va reduciendo la salsa.
4. Añadimos una nuez de mantequilla y dejamos en el fuego hasta que integre bien con el resto de ingredientes.
5. La salsa de soja ya es de por sí salada. Este plato no suele necesitar sal, pero siempre es a gusto del cocinero.
6. ¡Ya está! ¿Has visto qué fácil?