A ver, Rosalía. Yo sé que tú buscas cierta teatralidad en tus looks. Sé que te gusta darle una vueltecita de tuerca a prendas de marcas carérrimas y adaptarlas a tu manera de vestir. A mí lo que me gusta de ti es tu música, tía, que eres una genia. Pero en lo que respecta a tu última indumentaria, solo me sale decir: «eso es un look malBalmainte. ¡Tra, tra!».
¿Cuántas veces me has emocionado con tu música, Rosalía? Infinitas, las cosas como son. La primera vez que vi tu vídeo de Malamente lo recordaré siempre. Y aquella versión de Me quedo contigo en la gala de los Goya. Buf, buf. Los pelos como alcayatas de colgar cajas fuertes. Mira, mira. Como bolardos, los pelos.
Y en el otro lado, supongo que por compensar, están tus estilismos. Porque la perfección no existe, Rosalía. Porque tenía que haber algo que me sacara del estado de felicidad en el que me dejan muchos de tus temarrazos. Y vas el otro día y te plantas en Nueva York con un total look de Balmain. Pero no cualquier look, no. Un look malBalmainte, vaya.
Por dónde empezar. Por dónde, si me arden los ojos.

Rosalía, ¡piensa en mi mirá!
Yo soy una persona con un sentido muy práctico de la vida. Es cierto. Y concibo una jerarquía en las partes del cuerpo que han de ser cubiertas. Por ejemplo, las manos van al final. Si hay chicha al aire, las manos no pueden ir enguantadas. Salvo que seas Greta Garbo en una peli viejuni, que no es el caso. Así que mi cerebro me martillea con el siguiente pensamiento: ¿por qué te tapas las manos si hay pierna y cintura al fresco? ¿Por qué, Rosalía? ¡Que me das frío y calor al mismo tiempo!
Hombreras óptimas para mantener la distancia de seguridad
Una cosa te concedo. En este look malBalmainte, cuyo print ha vuelto a la pasarela (se lo vimos a Pelayo Díaz y Jorge López), las hombreras son un puntazo. Porque con ese remate esquinado que exhiben te aseguras de que nadie se acerque más de la cuenta. A quien lo intente le sale por un ojo de la cara. Literal. Y más teniendo en cuenta el precio al que se cotiza el centímetro cuadrado de look malBalmainte, Rosalía. Que solo el bolsito cuesta 2.800 eurillos de nada.

¿’Print’ o esprint?
Soy una mujer de mundo, además de práctica, y tomo nota de la vuelta a los años 90 en la que estamos sumidos. Yo ya he llevado esos pantalones de ciclista, Rosalía. Bueno, los de tu look malBalmainte no, esos no. Unos de marca baratuna. Por ahí habrá fotos que dan cuenta del oprobio. Y como persona escaldada tengo que decirte que horribles eran entonces y horribles son ahora. Rosalía, que muy bonito el estampado de Balmain, pero que los llevas en unas puñeteras mallas de ciclista y yo ya no sé si eso es un print o un esprint.
Del bañador más viral al look malBalmainte
Chica, es que escúchame, compréndelo, cualquier cosa que te pones da la vuelta al mundo. Que tú eres muy grande, maja. Que hace tres días te plantaste un bañador de color carne (puede que no haya un color más horrible en el mundo bañador) y llevas tres millones de likes. ¡Que yo me pongo un bañador de color carne, lo subo a Instagram y lo más que recibo es un ingreso en cuenta de mis amigos para que me compre otro!

En fin, Rosalía, ya me sabrás perdonar: adoro lo que haces, admiro tu profesionalidad, pero tu look malBalmainte me tiene un poquito mareá. Voy a lavarme los ojos con oxígeno activo, a ver si se me pasa. Y luego miraré TKN, tu vídeo con Travis Scott, que me encanta y me pone de muy buen humor.