La noche negra de Gonzalo Miró en Masterchef: expulsado y con sus secretos amorosos revelados

No fue la mejor noche para Gonzalo Miró en Masterchef, y no solo porque fuera el eliminado: Boris Izaguirre desveló algunos de sus secretos amorosos mejor guardados

Venga, ahora que están remontando ya lo podemos decir: estamos muy contentos, porque Masterchef Celebrity empieza a coger ritmo. Confesamos que los últimos programas nos han resultado un poco aburridos, aunque siguiera ahí la emoción por ver quién abandonaba cada semana. Pero no sabemos si porque cada vez está más cerca el final, porque se van soltando o por cómo se desarrollaron las tres horas de programa. El caso es que el programa de este martes nos ha gustado mucho, a pesar de que ha sido el último de Gonzalo Miró en Masterchef. No era de nuestros favoritos, pero tampoco de los que menos nos gustan. Y también ha tenido momentos muy divertidos, aunque no lo parezca.

Pero antes de su despedida, hay mucho que contar, porque no fue su mejor noche, y no solo por la despedida. El programa invitó a una persona que nos hizo reír mucho, Boris Izaguirre. Sobre todo por ese momento Sálvame que tuvo durante la primera prueba contando a los jueces el currículum amoroso de Gonzalo Miró al completo. Pasó por Natalia Verbeke, Eugenia Martínez de Irujo, Amaia Montero, Malú y su novia actual, Noelia. Y sube el volumen y escucha hasta el final, porque te vas a enterar de cómo rompieron Gonzalo y Natalia, allá por 2004:

Sí, lo has oído bien. Según Boris Izaguirre, ¡lo dejaron por fax! No damos crédito a esta revelación del mundo del cuore. Nos hemos quedado patitiesos. Pero principalmente porque en ese año ya había móviles, así que tampoco había necesidad de ser tan clásico. Boris estaba desatado. Y siguió hablando y hablando de su amigo, al que conoce desde hace años. No sabemos qué tal le habrá sentado enterarse de que también reveló uno de sus secretos mejor guardados: quién fue su amor platónico. Y sí, también lo has oído bien: Loles León. Te dejamos un minuto para que te recuperes del impacto.

Encima es que el programa había empezado con un bingo, que nos encanta… Bingo, fax… por un momento pensábamos que estábamos en 1995, pero no. Estábamos en 2020 viendo Masterchef Celebrity, eso sí. La prueba la ganó Celia Villalobos, y tuvo como jueces a los amigos de los aspirantes, que tenían que elegir el mejor plato e intentar adivinar cuál era el que había cocinado su amigo. Y lo que nos temíamos: no dieron una. Solo acertaron las amigas de Josie, entre ellas la dueña de un catering con la que esta practicando durante su paso por el programa, así que jugaba con ventaja. Pero no nos vamos a quejar, que ya sabéis que Josie es uno de nuestros favoritos. Y así somos aquí. Tendremos virtudes, pero la imparcialidad no está entre ellas.

No podemos negar que se nos rompió un poco el corazón cuando vimos que él, La Terremoto y Nicolás -nuestro top 3- se iban a la prueba de eliminación junto con Gonzalo Miró, después de que su equipo perdiera la prueba de exteriores. Es verdad que no podemos defenderlos, porque bien, bien, no salió. Y además en parte fue culpa de nuestra pareja favorita. Porque les tocó pelar anchoas y pensaron que era un buen momento para convertirse en comentaristas de lo divino y lo humano, empezando por su chef, del que La Terremoto se quedó prendadísima.

Lo bueno es que para la prueba de eliminación los dos se pusieron las mejores galas. Josie unas mangas fucsias con una cola dividida que se podía atar delante y atrás. Y La Terremoto un pez – chancla a modo tocado. Maravillosos ambos para decir adiós a Gonzalo Miró en Masterchef Celebrity, aunque sin saberlo todavía.

Y con carpa en la cabeza y todo, La Terremoto fue otra vez la mejor de la prueba, que consistía en hacer unos bombones. En el lado opuesto, Gonzalo Miró, que fue el expulsado de la noche, provocando las lágrimas de sus compañeros. Cada vez ven más cerca el final y eso mola mucho; pero cada martes tienen que despedir a un compañero y eso igual ya no les mola tanto. Eso sí, que nadie nos quite la imagen de Josie llorando con ese estilazo.

El martes que viene, más.