Anoche se celebraron los Grammy 2021 y todavía estoy flipando con los momentazos que nos regaló la jornada. Para bien… y para mal, tampoco os voy a engañar. Esto fue lo mejor y lo peor de la gala.
Anoche se entregaron los Grammy 2021 y nos queda una sensación agridulce. En el lado bueno, premios merecidísimos y performances espectaculares; en el malo, algunos looks difíciles de olvidar (por el lado que no es).
Top 1 de lo mejor de los Grammy 2021: el power women
Si hubo una sensación final ayer fue la del poderío de la mujer en la industria musical. Tres mujeres brillaron con luz propia: Beyoncé (que lograba, con su 28º gramófono, convertirse en la artista más laureada de la historia), Taylor Swift (que se sumaba a la élite de artistas con tres estatuillas al mejor álbum) y Billie Eilish, que ganó el premio a la mejor grabación del año después de haberlo megapetado en 2020. Por cierto, aquí te dejamos la lista completa de nominados y ganadores.
El premio inesperado
Fue un sorpresón. H.E.R. dio la campanada con el premio a la canción del año por I Can’t Breathe, que fue la respuesta musical a la ola antirracista tras la muerte de George Floyd a manos de un policía. No se esperaba este premio, pero nos alegramos muchísimo por todo lo que significa.
El reencuentro Harry – Taylor
Si hay algo que dejó a los fans sin respiración fue el reencuentro entre Harry Styles y Taylor Swift. Ambos fueron premiados (ella, por el mejor álbum a Folklore; él, por la mejor actuación en solitario) y pudimos ver una de esas imágenes solo comparables al reencuentro entre Jennifer Aniston y Brad Pitt: sonrientes, estuvieron un rato charlando entre ellos. ¡Morimos de amor!
Actuaciones de infarto
Hubo algunas actuaciones que el fandom aplaudió hasta que les sangraron las manos:
La gente flipó fuerte y flojo con la performance de Dua Lipa:
Y seguramente, de entre todas, destacó la de Taylor, que llevó un bosque encantado al plató para interpretar tres temas de su nuevo álbum:
El estilazo de Billie Eilish con mascarilla
No fue la única (también Taylor Swift llevó la suya a juego con el vestido), pero el lookazo total de Billie Eilish, gorro, diseño de uñas y mitones incluidos, me tiene enamoradita:
El top 1 de lo peor: el look encogido de Harry Styles
Lo de Harry Styles jugando a ser David Bowie ya huele. No sé vosotros, pero yo, cada vez que lo veo con esa ropa que parece que la ha lavado a 90 ºC mezclando cuadros y rayas, pues… me raya, valga la redundancia. Lo de la boa es lo de menos: es ese intento de traer de vuelta la estética del glam rock con irregulares resultados. Que igual soy yo, pero no me va nada.
El maquillaje mórtimer de Phoebe Bridgers
Phoebe Bridgers apareció con un look halloweenesco que sí, divertido será un montón, pero bonito ya menos. La ropa-esqueleto y el maquillaje pálido con labios morados le daba un aire mórtimer, sí, pero poco favorecedor.
Noah Cyrus, entre recién despertada y huevo frito
Lo de la familia Cyrus para dar el cante es ya un clásico. Noah, la hermana menor de Miley, apareció acompañada por su madre y con un vestido de Schiaparelli que estaba a medio camino entre un huevo frito con puntilla y un despertar entre sábanas de raso arrugadas que sí, que para quien lo quiera, pero que no.
Bruno Mars, camarero de crucero
Termino con el look de Bruno Mars que a mí, que ya tengo una edad o dos, me recuerda fuertemente al de Isaac, el camarero de Vacaciones en el mar:
Y con esto doy por finiquitado mi resumen de lo mejor y lo peor de los Grammy 2021. ¿Qué os moló (o todo lo contrario) a vosotros?
