A falta de tan solo tres días para el evento, Anabel Pantoja y Omar Sánchez se han quedado de piedra al enterarse del fallecimiento de Doña Ana, que probablemente obligue a suspender la boda de Anabel Pantoja.
Estaban pendientes de que todo salga a la perfección el próximo viernes pero un trágico suceso probablemente obligue a suspender la boda de Anabel y Omar. Y es que nos acabamos de enterar de la trágica noticia del fallecimiento de Doña Ana, la madre de Isabel pantoja. Ayer, la enamorada pareja apuraba la cuenta atrás para su fiesta recorriendo con algunos amigos y familiares los lugares más turísticos de la isla canaria, de quienes se han convertido en los mejores embajadores.
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Ayer no imaginaban lo que podría desencadenar la triste noticia
Ayer tanto Anabel como Omar estaban muy unidos y sin rastro de nerviosismo por el momento – ya que la pareja se casó el pasado 17 de septiembre en la intimidad. Anabel y Omar ya disfrutaban del ambiente tranquilo y del clima de La Graciosa, por cuyas calles de arena pasearon como dos vecinos más ajenos a la expectación que se ha creado por el que podría ser el evento del año en la pequeña isla y que parece que peligra por la muerte de Doña Ana hoy día 29 de septiembre por la mañana.
Volcados en promocionar el paraje, la colaboradora y el surfero, con looks cómodos y de lo más sonrientes, visitaron el famoso Museo Chinijo – un coqueto espacio para conocer mejor la historia y la vida de esta isla tan diferente como mágica – y dejaron un mensaje de lo más especial en el libro de visitas.
Feliz, y ajena a la que se le venía encima, Anabel nos contó cómo está a falta de tres días para su gran boda. «Me vine ayer para preparar las cosas. Estoy bien, un poco nerviosa. Ultimando las cosas y con mil cosas en la cabeza», ha confesado, admitiendo que está «cansada» de que se hable de las ausencias y dejando claro que «van a venir los que puedan». «Los que no puedan venir no pasa nada, hay más celebraciones y ya está, yo ya estoy cansada», ha señalado, confirmando que Kiko e Isa estarán presentes en su enlace: «Claro, ellos vienen pero llegarán escalonadamente».
Desvelando que su boda ‘oficial’ fue algo «muy cortito, familiar, que compartimos después con amigos en Gran Canaria», la sobrina de Isabel Pantoja desvela que ahora «tengo muchas ganas de la celebración, aunque estamos muy asustados con el tiempo», sin imaginar que algo mucho más triste y doloroso se acercaba a su vida amenazando con suspender la boda de Anabel.
